El “bebé más prematuro del mundo” entró al Guinness por nacer a las 21 semanas

Curtis pasó más tiempo internado que en la panza de mamá. El Libro de Récord Guinness lo reconoció por ser el bebé más prematuro del mundo, al haber nacido con sólo 21 semanas y un día de gestación.

Eso fueron unos 5 meses de embarazo, mientras que en neonatología pasó un total de 9. Desde que nació en julio de 2020, junto a su hermanita que no pudo sobrevivir, recibió durante 275 días un tratamiento intensivo conectado a equipos de oxígeno y alimentación.

Cuando la mamá lo dio a luz luego de un trabajo de parto complicado y con sólo 420 gramos de peso, el pronóstico de los médicos en el Hospital UAB de Alabama, Estados Unidos, fue un 1% de probabilidades de supervivencia.

Pero pronto comenzó a demostrar “que respondía al oxígeno, su frecuencia cardíaca subió, sus números subieron”, según relató su pediatra a cargo, Brian Sims.

“Nos estaba dando muchos comentarios positivos de que quería sobrevivir. He estado haciendo esto casi 20 años, pero nunca había visto a un bebé tan joven ser tan fuerte como él”, sentenció emocionado.

“Cuando tenía alrededor de tres meses, finalmente pudimos desconectarlo del respirador. Ese fue un momento especial para mí. Cuando se iba a casa, teníamos la sensación de ser privilegiados por haber podido cuidar de él y de su madre”, señaló Colm Travers, profesor adjunto de la División de Neonatología de la UAB.

Él fue quien le recomendó a la mamá iniciar el trámite para que su hijo entrar al Libro de Récord Guinness. Ella por su parte, recordó la emotiva sensación de poder llevar a casa a su hijo y que lo pudieran ver sus hermanos mayores.

El doctor Sims, comentó que “la historia de Curtis será estudiada y podrá ayudar a mejorar la atención a los bebés prematuros de todo el mundo”.

Antes de Curtis Means, el más prematuro era Richard de Wisconsin, quien nació con 21 semanas y 2 días de gestación, un mes antes que el nuevo récord mundial.